La Ciudad
Romana. Volubilis
![]() |
Plano Ciudad Tipo romana |
La ciudad romana
de nueva planta, como el campamento, es de forma cuadrada o rectangular, con
una puerta en el centro de cada lado, correspondiente a sus dos calles
principales, el Cardo, que es la mayor, y el Decumano, o transversal. En el
punto de corte del Cardo y el Decumano se solía disponer el Foro, que es el
espacio que representa el ágora para los griegos. Sin embargo, en
contraposición a la humildad de la decoración de las stoas griegas, en Roma se
aporta un carácter artístico y monumental. En un primer momento, el foro surge
como un lugar de encuentro y como lugar de comercio, y que a medida que van
desarrollándose la complejidad urbana, estos centros se convierten en
auténticos centros sociales. Dentro del foro, por norma general, los edificios
se distribuyen de forma ortogonal, dejando el punto de corte del Cardo y
Decumano por debajo del centro del mismo, siendo el “ombligo” de la ciudad.
El Foro de mayor
importancia es el de la ciudad Roma, que se caracteriza por estar situado en un
estrecho valle en la parte inferior de la colina Palatino. Desde el principio
se levantan en él un conjunto de monumentos públicos, ligados a la historia
romana. Los edificios y elementos conmemorativos llegaban a tal punto en su cantidad,
que la anchura de la calle principal no era superior a 4 metros. En el testero,
sobre el Capitolio, se levanta el Tabularium, y a su lado, el templo de Júpiter
Capitolino. A sus pies, se encuentran los templos de la Concordia, de los
Dioses Consentes y de Saturno, y, ante ellos, presidiendo la explanada
principal del Foro, la Rostra, que era una plataforma en donde se realizaban
arengas públicas. A ambos lados, y de manera longitudinal, se disponían la
Basílica Julia y el Templo de Cástor y Polux, así como el Arco de Severo y la
Basílica Emilia. En la parte posterior se disponen el templo de Julio César y
el de Vesta, quedando por detrás, y a mayor cota de altura, el templo de Venus
y Roma, y por la del Palatino, la Domus Tiberiana.
Planta Foro Roma |
Sin embargo,
llega un momento en el que la cantidad de edificios construidos en el Foro ya
no permite seguir edificando en esos terrenos, lo que obliga a empezar a
desplazar nuevos foros fuera del perímetro del espacio que en un principio
habían ocupado los anteriores. Estos son los llamados Foros Imperiales, entre
los que destacan el Foro de Augusto y el Foro de Trajano, siendo el primero que
se crea para tal fin el Foro de Cesar. Todos estos nuevos foros se crean
asumiendo la formalidad de la simetría axial.
En general, las
puertas son sencillas, pero en algunos casos las puertas se conciben desde la
monumentalidad y la escenografía, como la Puerta Mayor de Roma. El foro, sin
embargo, es el lugar donde se encontraban los edificios de la administración
pública, así como los templos. Las ciudades, además, se encontraban rodeadas de
unas potentes murallas para poder realizar de manera correcta. Estas, a medida
que la amenaza exterior aumenta, son reforzadas con torres salientes, que
también se adoptan para flanquear las puertas de las ciudades. Este hecho es
claro en el ejemplo de la Puerta Negra de Tréveris, ciudad fortificada próxima
a la frontera con Germania. En España los recintos amurallados de mayor
importancia son las ciudades de Carmona, Barcelona o Lugo.
![]() |
Planta Foro Pompeya |
Otra de las ciudades
de mayor importancia en lo que se refiere al urbanismo es la ciudad de Pompeya.
En ella se da un paso más en lo que a organización en planta se refiere, ya que
el mercado se desplaza del foro, de tal forma que en él sólo quedan el conjunto
de edificios gubernamentales. Los laterales de la plaza son los lugares
elegidos para la disposición de los elementos ornamentales, que en este caso
son estatuas, configurando un espacio central de carácter puramente público. El
“ágora” tenía forma rectangular, quedando en la parte más alejada el Templo de
Júpiter, que además, mediante la disposición de un arco en la parte delantera,
quedaba enmarcado profundizando y encuadrando su perspectiva. Junto con Pompeya
la otra gran ciudad romana que se conserva en la que se puede leer de manera
clara su urbanismo es Herculano.
El caso de
Volubilis presenta unas características especiales debido a su ubicación. Se
conoce que existe presencia humana en este lugar desde el siglo III a.C. con el
establecimiento de un asentamiento cartaginés, de cuyas trazas han aparecido
ruinas. Este asentamiento fue anexionado al Imperio en el año 42 d.C., llegando
a tener una población de 20.000 personas que en su mayor parte se dedicaban a
la agricultura. Los elementos, en ruinas, que mejor se conservan y cuya lectura
es más fácil son:
- Foro, Basílica y
Templo de Júpiter: Se encontraban en la parte alta de la ciudad y configuraban
el centro público de la ciudad. Según la costumbre romana, estos edificios de
carácter público se disponen en la parte superior de la ciudad, en donde la
cota es más elevada.
- Termas: Se leen
debido a la presencia del hipocausto. Eran un punto de encuentro social.
- Arco de Caracalla:
Construido en el 217 d.C., se realiza en homenaje al emperador y su madre. Su
ubicación responde al urbanismo imperial, ya que se encuentra edificado en la
vía del Decumano. Se ejecuta con mármol y en su parte superior se conoce la
presencia de una cuadriga de bronce.
El elemento más
importante en el aspecto decorativo son los mosaicos, que decoraban los
elementos residenciales de personas de mayor nivel económico, político y
social.
La casa romana, a
su vez, constaba de numerosas tipologías, de manera que se podían dar Villas
Campesinas, Domus o las Insulae.
Las domus adoptan
elementos griegos, como es un patio como elemento ordenador de la casa. Suelen
aparecer además, un jardín trasero con peristilo, que potencia la axialidad del
espacio. El paso se produce a través del atrium, disponiéndose a los lados las
diferentes estancias que componen la casa.
Las insulae eran
viviendas colectivas que se desarrollaban en altura. Surgen de las domus y a
medida que se necesita se puede ampliar una planta hasta alcanzar un máximo de
3 ó 4 plantas. Por norma general, las insulae no medían más de 60 pies, que
equivale a 18 m de altura.
El conjunto de las
grandes ciudades romanas se encontraban a su vez unidas mediante una profunda
red de calzadas, que bajo un sistema constructivo de gran resistencia,
permitían la correcta relación de las diferentes urbes.
En la Tabula
Peutingeria se reconocen las relaciones que existen entre todas las ciudades
del imperio de una manera clara, configurando el primer plano de escala
geográfica que se conoce.
REFERENCIAS
ÁNGULO IÑIGUEZ, Diego (1978): Historia del Arte. Tomo I, RAYCAR, Madrid
SÁNCHEZ, Mª Ángeles (1998): La Casa Urbana Romana y su Ajuar, Museo Arqueológico Nacional, Madrid
No hay comentarios:
Publicar un comentario