Infografía y Patrimonio. Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Granada
viernes, 21 de junio de 2013
Hipótesis 5: Evolución de la tipología romana hasta Al-Andalus
En el mes de mayo
realizamos una visita a la Alhambra con la asignatura de Matemáticas aplicadas
a la Arquitectura y al Urbanismo. En ella, pudimos observar un sinfín de
elementos, tanto constructivos como decorativos que suponen, interpretando una
vez conocidos los modelos romanos, una copia, adaptación o evolución de los que
se utilizaban en Roma, y en el caso que concierne a este curso en concreto,
Volubilis.
http://faculty-staff.ou.edu/L/A-Robert.R.Lauer-1/califatoandalus.jpe |
Si nos ponemos en situación, la entrada de los moriscos en la Península Ibérica se produce entre los años 711-715 d.C., cuando los generales pertenecientes al Califato Omeya conquistan en un proceso que comienza en la Batalla de Guadalete. En el año 756 d.C. se termina por consolidar la primera fase de Al-Andalus, quedando instaurado el Emirato de Córdoba, que es sucedido por el Califato de Córdoba y finalmente se generarán los diferentes Reinos de Taifas, un total de treinta y nueve pequeños reinos que finalmente acaban trasladando su capital hasta Granada.
La Alhambra, por otra
parte, comienza a construirse en el año 889 d.C., comenzando por la zona de la
Alcazaba. Al igual que la cultura romana, que asumió los modelos griegos en la
mayoría de los aspectos posibles, los musulmanes hicieron lo mismo con los
romanos, y aunque introdujeron, en el plano de la arquitectura muchos cambios
tipológicos formales, hay un sinfín de elementos de la arquitectura romana
reconocibles en la arquitectura de Al-Andalus, y más concretamente, en la de la
Alhambra.
De esta manera, aparecen
elementos que hacen clara alusión a la arquitectura de Volubilis. En primer
lugar, el papel del agua dentro de los patios que conforman la tipología de los
Palacios. En el primer palacio de la Alhambra, reconstruido por Torres Balbás,
y que presenta una fuente que recuerda a la de la Casa de los Trabajos de
Hercules.
asume el sistema adintelado de la arquitectura romana, introduciendo los arcos que en este caso son meramente decorativos. Este sistema adintelado al igual que en Volubilis, se realiza mediante vigas de madera, quedando las cubiertas resueltas de la misma manera que en la arquitectura romana, por medio de vigas inclinadas de madera sobre las que se apoyarán las tejas, tejas que en el caso morisco son diferentes a las romanas. Los aleros de las cubiertas quedan resueltos de la misma manera en ambas tipologías, quedando las pequeñas vigas de madera que soportan la techumbre saliente por debajo de las tejas.
Además, asumen ciertas formas
de construir los dinteles. Éstos, al igual que “las arcadas”, quedan
construidos mediante una viga de madera de un canto importante. Del mismo modo,
las pequeñas vigas que soportan los forjados quedan embutidas en los muros, sea
cual sea la materialidad del mismo.
En las cubiertas, al
igual que en las romanas, no existe un patrón formal que aúne las cubiertas en
un solo conjunto, sino que cada faldón responde a una división interior en
sección, que en este caso es a partir de las relaciones matemáticas áureas,
mientras que en la arquitectura romana partían de las disposiciones realizadas
por Vitruvio. De esta manera, se crean en estos conjuntos un gran número de
faldones de cubiertas independientes, que hace que se genere una volumetría
ecléctica en ambos tipos de arquitectura.
Es en el ámbito de la decoración donde se produce un fuerte contraste, a la vez que reciclaje de las tipologías romanas anteriores. Dada la religión
musulmana, en la que la representación de figuras animales y humanas queda prohibida, es imposible que se sigan utilizando los frescos murales en los que aparecen personas, además de quedar impedida la representación escultórica de las figuras humanas. Esto, sin embargo, no supone un problema en la decoración, ya que se siguen decorando las paredes y techos a través de diferentes elementos pictóricos, de diferentes colores. Así, e la decoración de los mocárabes, aparece el color azul cobalto como el color fundamental de su decoración, llegando esta decoración por medio de la pintura a su punto culmen en la Sala de los Reyes, en donde aparece el color rojo como el que representa a dichos reyes, y que queda reflejado en toda la techumbre.
Encontramos una similitud
con la Casa de los Trabajos de Hércules, que consiste en el empleo del mármol.
El mármol, en ambas culturas, es símbolo de poder, debido a su alto precio, por
lo que su empleo queda limitado a grandes personajes de gran poder dentro de la
sociedad. Según Etiénne, parece claro que parte de los suelos de la Casa de
Hércules, además de por mosaicos, estaba compuesto por mármol, que al igual que
en la Alhambra, es usado como manera de referenciar el nivel social.
Por tanto, se ve un claro
pillaje de la cultura árabe sobre la cultura romana, que a su vez, había
realizado lo mismo con la cultura griega. Dichos valores constructivos fueron
asumidos por los moriscos desde la caída del Imperio Romano hasta el 711 d.C.,
cuando deciden entrar en la Península Ibérica, trayendo consigo dichos valores,
adaptando ciertos elementos, sobre todo los que hacen referencia a su religión,
de carácter prohibitivo.
Esto, lleva a pensar que
para hacer una reconstrucción virtual de un determinado edificio perteneciente
a una cultura en concreto, no sólo hay que especializarse en dicha cultura, sino
que hay que tener una amplitud de miras mayor, y comprender los modelos de
culturas anteriores y posteriores. Además, en este caso en concreto, resulta
curioso como los modelos constructivos griegos no sólo se llevan a Volubilis o
a la Península, sino que son exportados a todos los lugares que en algún
momento fueron dominados por culturas que tienen su base histórica en el Mediterráneo.
REFERENCIAS
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
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http://catedu.es/materialesccss/Historia/CastillosyPalacios/edad_media/califate_750PEQ.jpg |
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http://nopuedonodebo.files.wordpress.com/2011/05/colonizacic3b3n-griega-e1304695678895.jpg |
REFERENCIAS
ÉTIENNE, Robert (1960) Le quartier nord-est de Volubilis, E. de Boccard, París (Francia).
ÁNGULO IÑIGUEZ, Diego (1978): Historia del Arte. Tomo I, RAYCAR, Madrid (ESPAÑA).
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
jueves, 20 de junio de 2013
Hipótesis 4: Decoracion en las Domus Romanas. Volubilis. Casa de Hércules
La cultura romana, es heredera de la griega, de la que
adopta muchos de los valores y la toma como referente. En el ámbito de la
decoración en la arquitectura, tras estudios arqueológicos de las ruinas mejor conservadas,
se ha podido demostrar que los romanos no sólo eran grandes ingenieros en lo
que a arquitectura se refiere, sino que además muestran apego por decorar las
diferentes arquitecturas, sobre todo si son arquitecturas de referencia, o en
su defecto, domus en las que se pretende aparentar, en un claro gesto barroco.

En el caso del peristilo de la Casa de Los Trabajos de Hércules, en Volubilis, no se puede tener claro la presencia de una estatua en el interior de la fuente, debido al mal estado de conservación de la misma, en la que sólo queda en pie los muretes que almacenaban el agua.
Por último, en el plano de la escultura, es más que probable la presencia de pequeños elementos de remate en los aleros de las cubiertas, situados en la parte interior de las tejas. Estás piezas, de material pétreo, son los precursores de los canecillos, cuyo nombre proviene de la evolución de dichas piezas escultóricas que tuvo lugar en el Románico, y en el que en vez de pequeñas piezas que representan caras, tomaban la forma de canes.
De esta manera, se conservan ejemplos de domus romanas en las que el color en las columnas del atrio era muy llamativo.
Sin embargo, es en Roma cuando esta técnica llega a su máximo exponente, siendo usados en la arquitectura para las tipologías de villa y domus, en las que se utilizaban como muestra de poder, quedando en las ruinas actuales un gran número de mosaicos de gran calidad.
En el caso de la domus de Los Trabajos de Hércules, la otra
tipología de suelos, junto al anteriormente nombrado de mármol y al de la
zona de la entrada y el de las tabernae, son los mosaicos. De hecho, y gracias a Etiénne, se tienen las medidas de todos los mosaicos que hay en dicha casa. La importancia de los mosaicos en esta domus es muy grande, ya que de hecho, su nombre hace referencia a la presencia de un mosaico en el que se muestran todos los trabajos de Hércules.
La ubicación de los mosaicos, al igual que ocurre con los otros tipos de decoraciones, se sitúa en las zonas más representativas de la casa, como son el oecus, el triclinium o ciertos cubiculum.
De esta manera, la decoración en los edificios asume la
manera griega de llevarlo a cabo, y por ello toma la decoración escultórica y
pictórica como el centro entorno a las cuáles gira dicha disciplina.
A lo largo de toda la extensión del Imperio Romano se
encuentran elementos invariantes en lo que se refiere a la decoración en las
domus.
Escultura.
Parece ser que los elementos escultóricos presentes en las domus romanas se ubicaban en el atrio de la casa, al ser ésta la zona más representativa de la misma. En dicho lugar, suele aparecer una fuente, rodeada de jardín, y que no sólo recoge el agua de la lluvia, sino que además funcionaba como elemento decorativo. En dichas fuentes, en su parte central, parece claro, según muestras encontradas en domus de lugares como Pompeya, Herculano o ruinas de ciudades como Juliobriga.
Parece ser que los elementos escultóricos presentes en las domus romanas se ubicaban en el atrio de la casa, al ser ésta la zona más representativa de la misma. En dicho lugar, suele aparecer una fuente, rodeada de jardín, y que no sólo recoge el agua de la lluvia, sino que además funcionaba como elemento decorativo. En dichas fuentes, en su parte central, parece claro, según muestras encontradas en domus de lugares como Pompeya, Herculano o ruinas de ciudades como Juliobriga.
En el caso del peristilo de la Casa de Los Trabajos de Hércules, en Volubilis, no se puede tener claro la presencia de una estatua en el interior de la fuente, debido al mal estado de conservación de la misma, en la que sólo queda en pie los muretes que almacenaban el agua.
Por otra parte, parece que los bajorrelieves podrían tener
una gran importancia en la decoración de las domus, en este caso, las grandes
casas situadas en las grandes ciudades del Imperio, reservadas a ciudadanos de
un poder adquisitivo enorme. Esto hace que en el caso de Volubilis pudiese
aparecer dicho tipo de decoración. Ésta, en el caso de las grandes casas de las
capitales del Imperio, solían aparecer en las estancias de relevancia de las
domus, el oecus, triclinium y como manera de tapar el arquitrabe que se forma
por el sistema adintelado de los atrios.
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Por último, en el plano de la escultura, es más que probable la presencia de pequeños elementos de remate en los aleros de las cubiertas, situados en la parte interior de las tejas. Estás piezas, de material pétreo, son los precursores de los canecillos, cuyo nombre proviene de la evolución de dichas piezas escultóricas que tuvo lugar en el Románico, y en el que en vez de pequeñas piezas que representan caras, tomaban la forma de canes.
Pintura
Es, en el plano de la pintura, en donde la decoración de las
domus toma más referencias de la cultura griega.
En toda la arquitectura griega se usa sin tapujos el color,
tanto en la arquitectura monumental como en la arquitectura de corte doméstica.
Así, y según estudios realizados sobre las ruinas de la Acrópolis, la presencia
de elementos pictóricos en dicha arquitectura era una realidad.
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De esta manera, se conservan ejemplos de domus romanas en las que el color en las columnas del atrio era muy llamativo.
Además, dicha coloración pictórica no sólo se utiliza en las
columnas del atrio, sino que además las paredes de las domus se decoran con
colores muy llamativos, que como ya he comentado, era una forma de aparentar
poder.
Ejemplos de decoración pictórica en paredes son:
El punto de máximo exponente en el que la arquitectura queda
decorada por la pintura es en el empleo de los frescos y murales. En general,
la pintura en Roma está al servicio de la Arquitectura, a diferencia de la
escultura, que era un ente propio. Esto, llevaba a que su empleo en los
espacios de gran representatividad de las domus estuviese dedicado con este
tipo de pinturas. En general, consistía en un paso más allá de los
bajorrelieves griegos, que se adaptan y asumen formas planas de gran colorido.
De esta manera, las pinturas murales que se realizan en las domus son de poco
desarrollo, a diferencia de las que se llevaban a cabo en los grandes
monumentos. Sin embargo, aunque su desarrollo no fuese muy grande, debido
fundamentalmente a la falta de espacios de gran envergadura como si ocurría en
los espacios públicos, se alcanzan obras pictóricas que son de un nivel de
perfeccionismo que les hace que algunas sean obras de arte.
Por norma general, estas pinturas se centraban en el tema de
la naturaleza, representando escenas de árboles de gran follaje con pájaros y
frutos, de tipo naturalista (VILLA DE LIBIA, ROMA) y escenas en las que se
representan pasajes mitológicos.
En este sentido, es más que probable que las paredes en Volubilis
no estuviesen desnudas de decoración de este tipo, aunque es una mera
suposición, ya que no se conservan ninguna muestra que pruebe su presencia.
En el Caso de la domus de los Trabajos de Hércules, es muy
probable su presencia debido al gran poder adquisitivo de la familia que
administraba dicha domus, y cuyo poderío queda demostrado con la aparición de
piezas de mármol, que casi con toda seguridad, fue el material que se empleó
para el suelo en casi todas las estancias, siendo la única domus en Volubilis
que presenta dicho suelo.
Mosaicos
El último de los elementos decorativos, y quizás el más
representativo de la arquitectura romana son los mosaicos. De nuevo, la técnica
del mosaico es asumida de los griegos, quienes a su vez, la habían heredado de
culturas anteriores como los sumerios o los cretenses.
Sin embargo, es en Roma cuando esta técnica llega a su máximo exponente, siendo usados en la arquitectura para las tipologías de villa y domus, en las que se utilizaban como muestra de poder, quedando en las ruinas actuales un gran número de mosaicos de gran calidad.
zona de la entrada y el de las tabernae, son los mosaicos. De hecho, y gracias a Etiénne, se tienen las medidas de todos los mosaicos que hay en dicha casa. La importancia de los mosaicos en esta domus es muy grande, ya que de hecho, su nombre hace referencia a la presencia de un mosaico en el que se muestran todos los trabajos de Hércules.
La ubicación de los mosaicos, al igual que ocurre con los otros tipos de decoraciones, se sitúa en las zonas más representativas de la casa, como son el oecus, el triclinium o ciertos cubiculum.
REFERENCIAS
ÉTIENNE, Robert (1960) Le quartier nord-est de
Volubilis, E. de Boccard, París (Francia).
ÁNGULO IÑIGUEZ, Diego (1978): Historia del Arte. Tomo I,
RAYCAR, Madrid (ESPAÑA).
martes, 14 de mayo de 2013
Hipótesis 3
REFERENCIAS
ÉTIENNE, Robert (1960) Le quartier nord-est de Volubilis, E. de Boccard, París (Francia).
ÁNGULO IÑIGUEZ, Diego (1978): Historia del Arte. Tomo I, RAYCAR, Madrid (ESPAÑA).
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
Hipótesis 2: Usos Estancias
REFERENCIAS
ÉTIENNE, Robert (1960) Le quartier nord-est de Volubilis, E. de Boccard, París (Francia).
ÁNGULO IÑIGUEZ, Diego (1978): Historia del Arte. Tomo I, RAYCAR, Madrid (ESPAÑA).
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
lunes, 29 de abril de 2013
Hipótesis 1
Una
vez realizado el levantamiento del estado actual de la vivienda Hércules, el
cual se encuentra en las entradas anteriores, se procede a comenzar con el
desarrollo de las diferentes hipótesis que permitirán desarrollar la
reconstrucción virtual de la domus.
Tal
y como se analiza en el levantamiento actual, en principio, no aparecen restos
de escaleras que indiquen que hubiese una segunda planta, luego se pasa a
analizar las diferentes posibilidades en la sección tomando como premisa esa
opción.
Para
ello se toma Los Diez Libros de la Arquitectura de Vitruvio como referente, ya
que en él se exponen las pautas a seguir en la construcción de ese momento de
las diferentes tipologías arquitectónicas de Roma.
Según
los Diez Libros de la Arquitectura, la altura de las diferentes estancias responde
a las siguientes premisas:
- Las
habitaciones que en planta muestran una relación rectangular, la altura de las
mismas responderá a la suma de ambos lados dividida entre dos.
- En
el caso de las estancias de planta cuadrada, o en su defecto, en aquellas cuya
planta tenga una relación cercana a 1/1, la sección de la misma será una vez y
media su lado.
- La
altura de los atrios queda definida según la regla de que la altura medida
desde el suelo hasta la parte inferior de las vigas que sustentan la cubierta
es una cuarta parte menos que la longitud total del mismo.
- Para
el Tablinum la altura medirá una octava parte más de lo que lo haga su anchura.
Por
ello, y tomando estas relaciones como referente, se procede a calcular las alturas
de cada una de las estancias:
Esto
lleva a poder hacer secciones sucesivas que pueden indicar el perfil que
pudiesen describir las cubiertas:
Sin
embargo, estas premisas sólo responden a estancias en las que la parte superior
esté conformada de manera adintelada, de tal manera que en estas normas no se
referencian espacios en los que la cubrición sea de manera abovedada o resuelto
con cerchas.
Por
encima de 7 metros de luz, los métodos constructivos de los que se disponían en
este contexto histórico no permitían que se pudiesen construir espacios de esta
manera, por lo que se debía pasar a otros modelos constructivos, entre los que
destacaban las bóvedas y las cerchas. En este sentido, hay varias estancias en
la domus que sobrepasan estas luces, lo que indica que es posible que no fuesen
construidas de una manera común. Estas estancias son las siguientes:
Tablinum.
Las dimensiones de la estancia son de 8.35x10.38 m., luego parece ser que en
ningún caso se podría llegar a cubrir este espacio de una manera común. Por
ello, se plantea que en primer lugar este espacio sea abovedado:
La
otra estancia que parece que no se pudo construir de una manera común, es la
que se usaba como terma de carácter público. Las dimensiones de esta estancia
son 7.41x17.37 m. Esto lleva a que el cálculo de las dimensiones en sección
según los libros de Vitruvio sea de 21.07m., lo que lógicamente no era posible.
Por
ello, al igual que en la estancia analizada con anterioridad, hace que sea
obligatoria la elección de un modelo diferente, lo que hace que de nuevo, se
deba de elegir entre la bóveda y la cercha.
SECCION
TERMA 1 Y 2
Existen
referencias de ambos modelos en termas a lo largo de todo el territorio romano,
lo que en principio, hace difícil la elección entre cualquiera de ellas:
Sin
embargo, la estructura situada en la parte posterior de esta estancia, en la
que aparecen grandes contrafuertes de piedra, hace pensar que las cargas que
estaban presentes en ese punto fuesen muy grandes, lo que puede indicar la
presencia de una bóveda.
Ese
espacio residual, parece responder a la forma típica de una exedra, forma
tomada de la arquitectura griega, y que se concibe como un lugar de reposo y
conversación. En un principio, es muy poco común la aparición de este tipo de
estancias en lugares de escala “doméstica, pero que sin embargo, es posible que
en este caso fuese posible, debido al carácter público de estas termas.
Además,
en la parte posterior a él, aparece otra estancia, abierta hacia el pasillo de
la izquierda, que en un principio parece que puede estar ligada a las termas, o
ser meramente un
Por
otra parte, en lo que se refiere al peto que en principio existía en muchas de
las casas de Volubilis, en la Casa de Los Trabajos de Hércules hay una zona del atrio, debajo de las columnas que en el estado actual aparecen pareadas, en la que se dispone un mosaico, lo que hace poco probable que estuviese presente en ese punto un peto. Sin embargo, en la otra zona del mismo pórtico, si que aparecen restos de una pequeña estructura, lo que hace posible que si que hubiese un peto en ese lugar. Por lo tanto, es probable que no fuese un peto continuo, sino un peto que no rodease por completo el impluvium.
Vitruvio, Los Diez Libros de la Arquitectura.
martes, 23 de abril de 2013
De la Fotogrametría a la Infografía. La reconstrucción virtual del palacio de al-Badi. Antonio Almagro
La
aplicación de la infografía al patrimonio comienza en el 1995-96, para mostrar
cosas que ya existían, ofreciendo interactividad con el monumento. Sin embargo,
la potencialidad de la herramienta radica en que puede llegar a mostrar el origen
del monumento, una vez que ha llegado a nosotros en mal estado. No es más que
una posibilidad de trasmitir conocimiento, para el público en general, por
parte de los técnicos.
Facilita
visualizar nuestras ideas, obligándonos a reflexionar sobre esos resultados,
siendo “un proceso iterativo que se retroalimenta”, es un proceso en continuo
progreso en la medida en que se amplían los conocimientos de los restos que se
van obteniendo.
Palacio
de Al-Badi Marrakech
Es
un edificio casi inédito, del que apenas se tenía bibliografía, de manera que
fue muy complejo realizar el levantamiento.
En
esquema, recuerda al Palacio de los Leones, pero de unas dimensiones mucho más
grandes.
El
proceso por el que se optó, fue la fotogrametría, estableciendo un proceso completo
en el que toda la información que se obtiene en el mismo se distribuye en el
propio monumento.
El
palacio es de dimensiones descomunales, ya que el lado mayor mide 135 m.
La
historia del palacio está relacionada con la de al-Ándalus, ya que se edifica
para conmemorar la Batalla de los Tres Reyes, en la que Portugal se anexiona al
territorio español. Apenas 100 años
después, en el momento en el que accede al poder una nueva dinastía, el palacio
es expoliado con el fin de que el antiguo palacio no hiciese sombra al palacio
que él mismo estaba edificando para que fuese imagen de su reinado. Tras el
expolio, sólo quedaron presentes, los muros estructurales, quedando desnudos de
toda decoración. Esos muros son de tapia, realizados con hormigón de cal, lo que
hace que el edificio se conserve estructuralmente más o menos tras como
quedaron en el saqueo.
El
palacio estaba compuesto a imagen del Palacio de los Leones, con cuatro grandes
parterres que quedan a una cota de -3 m bajo la cota de paso, con dos grandes
“templetes” que sobresalen en el patio. Esos templetes eran los salones donde
se ejercían las reuniones de recepción, de cara a los líderes que pudiesen
venir, además de grandes comerciantes; en definitiva, era la zona visible del
palacio.
A
través de las trazas que quedaron en el expolio, se pueden realizar una
hipótesis sobre el revestimiento de la fachada, quedando en la parte inferior,
según esta hipótesis, el alicatado de azulejo y por encima de éste yesería. En
la parte superior, aparecen mechinales de las vigas del forjado, quedaron otros
mechinales que eran los lugares en los que se encajaban los pares de la
cubierta. Por último, en la parte superior parece que se encontraba un muro de
tapial pobre.
Esta
información es necesario tenerla medida, y para ello se comienza a bucear en
documentos históricos, llegando a documentos que muestran el estadio primigenio
del edificio, que luego con posterioridad parece que tiene muchos puntos en
común con la hipótesis desarrollada en el proyecto.
En
este caso, la documentación del monumento a través de la fotogrametría, técnica
que en los últimos años ha llegado a ser un instrumento de gran utilidad, ya
que es fácil de realizar y con un coste no muy grande.
El
funcionamiento de la técnica es la misma que la de la fotografía, ya que el
modelo fotográfico como herramienta matemática que referencia coordenadas
espaciales que permiten calcular la posición espacial de los deferentes
elementos. De esta manera, en principio, solo se necesita una orientación y
pares de fotos, lo que permite que el sistema realice de manera automática la
volumetría del objeto en cuestión.
Sin
embargo, esta no es la única forma de realizar el modelo tridimensional de un
objeto, ya que se puede realizar con más de una fotografía, lo que permite
realizar procesos más complejos.
De
esta manera, siguiendo con las hipótesis, y tomando las medidas de referencia
del arranque del forjado y de la altura de las diferentes columnas, se puede
llegar a dos hipótesis de cubierta, en las que los pabellones pueden quedar
definidas por medio de faldones simples o faldones compuestos.
Sin
embargo, este proceso da como resultado una serie de imágenes en las que es imposible
que se llegue a una exactitud milimétrica, y solo se debe usar como una manera
de sugerir como era el espacio arquitectónico que se representa, sin fijarse en
los detalles, sino que en definitiva es una herramienta que muestra la calidad
espacial de los modelos.
REFERENCIAS
REFERENCIAS
Conferencia Antonio Almagro Gorbea, Consejo Superior de Investigaciones Científicas
Escuela de Estudios ÁrabesLa Representación Gráfica en la Arquitectura. Conferencia de Concepción Rodríguez Moreno.
Desde
el principio de los tiempos las diferentes civilizaciones han tenido la
necesidad de plasmar lo que les rodeada,
gracias a lo cual comenzaron a surgir las diferentes técnicas pictóricas, de
las que muchos de sus ejemplos, no han llegado hasta nosotros debido a su
destrucción.
Desde
la Prehistoria, el hombre ha ansiado buscar diferentes maneras de
representación, y así se encuentran las primeras pinturas tecniformes, en las
que quedan plasmadas construcciones, resaltando en ellas tanto la estructura
como las cubiertas. Por otra parte, en esta época, también están presentes
representaciones pictóricas de animales en las que se intenta establecer
una leyenda de codificación, como puede
ser el punteado o el rayado.
No es, sin embargo, hasta la aparición de la escritura el momento en el que aparece la representación planimétrica con unos parámetros en los que podemos empezar a reconocer arquitectura. Estos planos no eran más que meros croquis de las plantas de los edificios más representativos, de los que también aparecen maquetas, como otra forma de representación, teniendo ambos métodos un carácter más simbólico que proyectual.
Es en Mesopotamia donde se comienza a desarrollar la representación a través de la escritura cuneiforme, siendo este el primer tipo de escritura documentada de la historia. En el ámbito de la tipología representativa, aparecen maquetas, que al igual que en las civilizaciones posteriores, tiene un fin meramente simbólico.

La primera de las grandes civilizaciones en las que la representación gráfica tiene un peso considerable en la sociedad es en Egipto, en donde las figuras que se dibujan no son proporcionadas, sino que se representan con una intencionalidad clara dependiendo del objetivo con el que se realice. Además, es importante destacar que es en esta época en la que se comienza a avanza de manera muy rápida en la búsqueda de los diferentes criterios de representación, ya que se fijan unos criterios de obligado cumplimiento.
En Grecia, aunque se sabe por manuscritos que han llegado hasta nuestros días que se realizaban este tipo de planimetría. Sin embargo, gracias a dichos manuscritos, si se ha podido saber que ya en esta época se realizaba un inventariado minucioso acerca de todos los costes de las obras. Aparece a su vez un nuevo modelo de representación, la maqueta, parece ser que utilizada ya si como herramienta de proyecto. Estos modelos estaban constituidos por tablillas de mármol en las que se realizaban pruebas para estudiar el tipo de capitel que se iba a usar.

La siguiente gran civilización que ocupó la historia fue Roma, que tenía entre sus principales objetivos fomentar la cultura. En Roma se ponen las bases del salto cualitativo que este tipo de representaciones toman en todos los ámbitos, apareciendo restos de grandes planos realizados en mármol. Aparece por primera vez la perspectiva, muy pobre, a modo de trampantojo en las paredes.
La Edad Media, en este ámbito, al igual que en todos, supone un retroceso en los avances realizados, que no impide sin embargo que se conserven grandes maquetas de iglesias de una enorme fidelidad.
Con
la figura de Piranesi, en el Barroco, se da una vuelta de tuerca más a la
representación tal y como se conocía hasta el momento. Piranesi es uno de los
grandes grabadores de la historia, y su obra es representativa tanto de la
arquitectura real como de la arquitectura imaginada.

En
1839 se inventa la fotografía, lo que supone un avance frente a las litografías
que se habían realizado con anterioridad en la época romántica, de las que las
realizadas en la Alhambra.
Así, se empieza a documentar los edificios a través de fotografías, o que hace que tanto los levantamientos como las perspectivas y los diferentes tipos de representación. Además, surge un problema nuevo, y es que al ser en blanco y negro la fotografía, esto presta a la imaginación del intérprete de la fotografía los pigmentos de la misma, lo que sería un arma de doble filo a la hora de realizar las restauraciones.

No es, sin embargo, hasta la aparición de la escritura el momento en el que aparece la representación planimétrica con unos parámetros en los que podemos empezar a reconocer arquitectura. Estos planos no eran más que meros croquis de las plantas de los edificios más representativos, de los que también aparecen maquetas, como otra forma de representación, teniendo ambos métodos un carácter más simbólico que proyectual.
Es en Mesopotamia donde se comienza a desarrollar la representación a través de la escritura cuneiforme, siendo este el primer tipo de escritura documentada de la historia. En el ámbito de la tipología representativa, aparecen maquetas, que al igual que en las civilizaciones posteriores, tiene un fin meramente simbólico.

La primera de las grandes civilizaciones en las que la representación gráfica tiene un peso considerable en la sociedad es en Egipto, en donde las figuras que se dibujan no son proporcionadas, sino que se representan con una intencionalidad clara dependiendo del objetivo con el que se realice. Además, es importante destacar que es en esta época en la que se comienza a avanza de manera muy rápida en la búsqueda de los diferentes criterios de representación, ya que se fijan unos criterios de obligado cumplimiento.
En Grecia, aunque se sabe por manuscritos que han llegado hasta nuestros días que se realizaban este tipo de planimetría. Sin embargo, gracias a dichos manuscritos, si se ha podido saber que ya en esta época se realizaba un inventariado minucioso acerca de todos los costes de las obras. Aparece a su vez un nuevo modelo de representación, la maqueta, parece ser que utilizada ya si como herramienta de proyecto. Estos modelos estaban constituidos por tablillas de mármol en las que se realizaban pruebas para estudiar el tipo de capitel que se iba a usar.

La siguiente gran civilización que ocupó la historia fue Roma, que tenía entre sus principales objetivos fomentar la cultura. En Roma se ponen las bases del salto cualitativo que este tipo de representaciones toman en todos los ámbitos, apareciendo restos de grandes planos realizados en mármol. Aparece por primera vez la perspectiva, muy pobre, a modo de trampantojo en las paredes.
La Edad Media, en este ámbito, al igual que en todos, supone un retroceso en los avances realizados, que no impide sin embargo que se conserven grandes maquetas de iglesias de una enorme fidelidad.
Sim
embargo, es en el Renacimiento cuando se comienza a tomar conciencia del
patrimonio, y gracias a ello nacen nuevas formas de representación, básicas
para nosotros, como es la perspectiva cónica, siendo esta un avance realizado
bajo la tutela de Brunelleschi. Al tomarse conciencia de la calidad de algunas
de las obras arquitectónicas, se comienzan a documentar, como ocurre con el
caso de la basílica de San Pedro; levantamiento realizado por Tiberio Alfaro.

Así, se empieza a documentar los edificios a través de fotografías, o que hace que tanto los levantamientos como las perspectivas y los diferentes tipos de representación. Además, surge un problema nuevo, y es que al ser en blanco y negro la fotografía, esto presta a la imaginación del intérprete de la fotografía los pigmentos de la misma, lo que sería un arma de doble filo a la hora de realizar las restauraciones.
Por
último, a partir de la aparición en 1945 de la UNESCO, así como organizaciones
similares posteriores, así como la aparición de las nuevas tecnologías, han
permitido que se tome aún más conciencia sobre el concepto de patrimonio, y que
las acciones que se realicen para su registro y conservación sean más eficaces.
REFERENCIAS
REFERENCIAS
Conferencia Concepción Rodriguez Moreno, profesora ETSA Granada
lunes, 8 de abril de 2013
Domus Hercules. Volubilis. Estado Actual
REFERENCIAS
ÉTIENNE, Robert (1960) Le quartier nord-est de Volubilis, E. de Boccard, París (Francia).
lunes, 11 de marzo de 2013
La casa Romana. Estructura y Evolución. Conferencia de Lucía
Gómez Robles.
Casa tipo Itálica.
Todas las casas romanas, a pesar del paso del tiempo, y de
las modificaciones que se pudiesen haber llevado a cabo en cuanto a tipología
en ellas, guardan una misma estructura similar, cuyas partes más significativas
son:
-
Triclinium:
era el lugar de encuentro de la casa. Estaba formado por una estancia
generalmente cuadrada en la que se disponían de manera perimetral tres camas.
Eran espacios muy decorados, apareciendo dicha decoración en el espacio
central, quedando los laterales con un carácter pobre.
-
Tablinum:
Es un espacio que se caracterizaba por abrirse al atrio, quedando cerrado con
puertas.
-
Atrium:
Es un espacio diáfano, sin columnas. La estructura que salva esa luz está
constituida por dos grandes vigas sobre las que se apoya el resto del conjunto
estructural.
-
Larario:
Era un pequeño altar situado por normal general en el centro de la casa y que
se usaba para realizar diferentes oraciones y ofrendas a los Dioses.
-
Cubiculum:
Es un espacio reducido, decorado con mosaicos, y que normalmente se encontraba
cerrado.
-
Termas:
Aparecen como una evolución más de la domus. Se caracteriza por la presencia
del hipocausto, caldera inferior a la solería que permitía calentar el espacio.
Su interior solía ser marmóreo.
Esta tipología de casa en determinadas zonas, debido a las
características propias del lugar, junto con la riqueza económica, posibilita
que se desarrollen y tomen mayor complejidad. Uno de estos lugares es Roma, en
donde se asumen las formas griegas a través del peristilo, mediante exedras
posteriores, espacios que se usaban como lugar de encuentro dentro de la casa.
A medida que la casa fuese de un ciudadano de mayor rango social, aparecen
nuevas estancias, en este caso de servicio, que se podían ubicar tanto en
planta baja como en planta alta, en caso de su existencia.
![]() |
Organización Planta Domus |
Otro de los elementos que podían variar el proyecto de la
casa (y que aún en la actualidad lo siguen condicionando) son las medianeras.
En caso de que hubiese medianeras, la casa romana en general presentaba
modificaciones en torno a los recorridos que en ella se llevaban a cabo,
apareciendo nuevas puertas abiertas hacia la calle.
Esta evolución de la tipología de casa romana tiene uno de sus
máximos referentes en la Casa del Fauno. En ella se multiplican los espacios,
pero en todo momento se mantiene la tipología de casa romana tradicional. El
atrio se desdobla y ya no es sólo uno el que aparece. De esta manera, en la
casa se desvirtúa su espacialidad y formalidad primigenias, debido al conjunto
de actividades que se desarrollan a lo largo del tiempo.
En cuanto a las cubiertas,
aparecen un gran número de tipologías, presentando las domus estancias techadas
bajo cubierta inclinada y otras bajo cubierta plana. Además, aparecen en
cubierta las bóvedas, que generalmente se usan en lugares como las termas. En
los faldones de cubiertas inclinadas, por norma general, se usa la teja, la
cual tenía una canal plana, con los bordes laterales levantadas y la cobija
curva, realizadas por lo general de material pétreo o de arcilla.
En cuanto al pavimento, en las
domus se usaba una mezcla de piedra junto a materiales cerámicos vitrificados,
que se disponían en los mosaicos. La piedra se usaba por lo general en
estancias de un carácter más reservado, así como en la entrada de la casa, para
dar continuidad al pavimento de la calle, y así poder realizar la carga y
descarga de mercancía sin peligro de estropear elementos más valiosos.
Otro de los elementos de referencia
en la decoración de las casas, era la pintura mural. Estas pinturas se
caracterizaban por representar en la mayoría de los casos elementos geométricos
sobre fondo blanco.
En lo que se refiere a las
características constructivas de la ciudad de Volubilis, aparecen
peculiaridades derivadas de la zona en la que tiene lugar el asentamiento.
En contraposición del hormigón
típico romano, en el que se cogía piedras de pequeño tamaño y se mezclaban con
mortero, en este caso se usan bloques de piedra más sillarejo que junto a las
columnas utilizadas, de carácter monolítico, le confiere al conjunto una
pesantez de más relevante. Aparecen además, mosaicos, con colores muy variados
de los que se conserva algunos ejemplos, mientras que en lo que a pintura se refiere,
no se conservan muchos.
Análisis de las diferentes domus:
REFERENCIAS
ÁNGULO IÑIGUEZ, Diego (1978): Historia del Arte. Tomo I, RAYCAR, Madrid
SÁNCHEZ, Mª Ángeles (1998):
La Casa Urbana Romana y su Ajuar, Museo Arqueológico Nacional, Madrid
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